- PABLO NOS ALERTA SOBRE LA BATALLA :
Y yo sé que en mí, esto es, en mi carne, no mora el bien; porque el querer el bien está en mí, pero no el hacerlo.
Porque no hago el bien que quiero, sino el mal que no quiero, eso hago. Y si hago lo que no quiero, ya no lo hago yo,
sino el pecado que mora en mí. Así que, queriendo yo hacer el bien, hallo esta ley: que el mal está en mí. Porque según
el hombre interior, me deleito en la ley de Dios; pero veo otra ley en mis miembros, que se rebela contra la ley de mi mente, y
que me lleva cautivo a la ley del pecado que está en mis miembros. ¡Miserable de mí! ¿Quién me librará de este cuerpo de muerte? [Romanos 7:18-24]
- JESÚS NOS ENSEÑA COMO OBTENER LA VICTORIA :
- Entonces Jesús dijo a sus discípulos: “Si alguno quiere venir en pos de mí, (1) niéguese a sí mismo, y (2) tome su cruz, y (3) sígame.
Porque todo el que quiera salvar su vida, la perderá; y todo el que pierda su vida por causa de mí, la hallará.” [Mateo 16:24-25]
- Niéguese a sí mismo: En esta orden, Jesús declara la única condición de obtener la victoria contra los deseos y apetitos de la carne y es sencillamente diciéndole ¡NO! a la carne en el Nombre y en la autoridad de Jesús.
- Tome su cruz: Entonces Jesús nos reta en nuestra lealtad a ÉL — ¿Estamos dispuestos a no solo decirle ¡NO! a la carne pero también aceptar la cruz de sacrificio que ÉL llevó por nosotros y que nosotros debemos llevar también por ÉL?
- Seguirlo a ÉL: ¿A dónde? Al Calvario y morir con ÉL — Ahí era donde Jesús iba con su cruz.
- Jesús exige total lealtad de aquellos que quieren ser sus discípulos: (1) “El que ama a padre o madre más que a mí, no es digno
de mí; el que ama a hijo o hija más que a mí, no es digno de mí; (2) y el que no toma su cruz y sigue en pos de mí, no es digno de mí.
(3) El que halla su vida, la perderá; y el que pierde su vida por causa de mí, la hallará.” [Mateo 10:37-39]
- Amor a la familia más que a Dios: Nosotros amamos a nuestra familia con nuestras emociones y nuestro ser físico, pero Dios exige más que eso para ÉL,
“Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente.” [Mateo 22:37] En este mandato de Jesús, el espíritu [corazón]
es añadido y no es parte de cómo debemos amar a nuestra familia. Por eso Jesús exige ese extra grado de amor por Dios.
- El que no toma la cruz y lo sigue: El que no se quiere sacrificar por Jesús no es digno de ser un discípulo pues todavía la carne esta dominándolo.
- La vida carnal y la vida espiritual: Si nuestra existencia es todo alrededor de la carne y no del Espíritu de Dios en nosotros, entonces quizás no tengamos
el Espíritu de Cristo en nosotros como Pablo advierte con alarma: “Mas vosotros no vivís según la carne, sino según el Espíritu, si es que el Espíritu de Dios mora en
vosotros. Y si alguno no tiene el Espíritu de Cristo, no es de él.” [Romanos 8:9] [Si no se tiene el Espíritu, vamos al infierno]
- Mas advertencias de Jesús para sus seguidores y como obtener victoria :
- Yendo ellos, uno le dijo en el camino: Señor, te seguiré adondequiera que vayas. Y le dijo Jesús: Las zorras tienen guaridas, y las aves de los cielos nidos;
mas el Hijo del Hombre no tiene dónde recostar la cabeza. [Lucas 9:57-58]
- Jesús le advierte a sus discípulos que la vida que van a seguir con Él va a requerir muchos sacrificios y pocas satisfacciones materiales.
- Y dijo a otro: Sígueme. Él le dijo: Señor, déjame que primero vaya y entierre a mi padre. Jesús le dijo: Deja que los muertos entierren a sus muertos;
y tú ve, y anuncia el reino de Dios. [Lucas 9:59-60]
- La única lealtad que el discípulo de Cristo tiene es a Dios y a Su Reino y todo lo demás no puede tener prioridad.
- Entonces también dijo otro: Te seguiré, Señor; pero déjame que me despida primero de los que están en mi casa. Y Jesús le dijo:
Ninguno que poniendo su mano en el arado mira hacia atrás, es apto para el reino de Dios. [Lucas 9:62]
- Esa lealtad que le debemos al Rey y a su Reino es primordial y cuando le juramos a ÉL nuestra lealtad y ÉL nos da una asignación a
cumplir, no podemos mirar hacia atrás pues todavía la carne domina.
- BUSCAD LA SANTIFICACIÓN: [SEPARAR, APARTAR, CONSAGRAR, PURIFICAR, DEDICAR, SER SANTOS]
- “Pues la voluntad de Dios es vuestra santificación; que os apartéis de fornicación…que ninguno agravie ni engañe en nada a su hermano; porque el Señor es
vengador de todo esto, como ya os hemos dicho y testificado. Pues no nos ha llamado Dios a inmundicia, sino a santificación.” [1 Tes. 4:3,6-7]
- Hablo como humano, por vuestra humana debilidad; que así como para iniquidad presentasteis vuestros miembros para servir a la inmundicia y a la iniquidad,
así ahora para santificación presentad vuestros miembros para servir a la justicia…Más ahora que habéis sido libertados del pecado y hechos siervos de Dios, tenéis
por vuestro fruto la santificación, y como fin, la vida eterna. [Romanos 6:19, 22]
- Y esto erais algunos; mas ya habéis sido lavados, ya habéis sido santificados, ya habéis sido justificados en el nombre del Señor Jesús, y por el Espíritu
de nuestro Dios. [1 Corintios 6:11]
- Si alguno destruyere el templo de Dios, Dios le destruirá a él; porque el templo de Dios, el cual sois vosotros, santo es. [1 Corintios 3:17]
- La doncella tiene cuidado de las cosas del Señor, para ser santa así en cuerpo como en espíritu. [1 Cor. 7:34]
- Pero fornicación y toda inmundicia, o avaricia, ni aun se nombre entre vosotros, como conviene a santos. [Efesios 5:3]
- Sino, como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra manera de vivir; porque escrito está: Sed santos,
porque yo soy santo. [1 Pedro 1:15-16]
- ¡Cómo no debéis vosotros andar en santa y piadosa manera de vivir! [2 Pedro 3:11]
Despedida de Pablo al final de su ministerio: “He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe. Por lo
demás, me está guardada la corona de justicia, la cual me dará el Señor, juez justo, en aquel día; y no sólo a mí, sino también a todos los que aman
su venida.” [2 Timoteo 4:7][Para Pablo su logro más grande fue haber servido al Rey Jesús hasta el final en la pura FE del evangelio, y no todo lo que
hizo para avanzar el cristianismo.]